Abriendo caminos ante la adversidad

El llegar a Cúcuta fue un cambio difícil y drástico, el dejar sus costumbres su cotidianidad marcó su vida, tanto así que lo recuerda como si hubiera sido ayer. Así narra Alexander Medina esa parte de su historia.

Sin saberlo, Alexander desde niño pronosticaba su destino, pues en sus juegos y aventuras con los amigos siempre se inclinaba por el papel de educador, que hoy en día es su profesión.

Su vida ha estado rodeada de cambios a raíz de la separación de sus padres. Alexander enfrenta su realidad trabajando desde muy joven, dejando sus estudios y priorizando la necesidad de ayudar a su madre para alivianar los gastos de la casa. Fue así, como este joven ejerciendo diferentes labores se formó con responsabilidad y gallardía para enfrentar los cambios que la vida le traía, buscando nuevas oportunidades en diferentes ciudades y experimentando situaciones buenas y otras no tanto.

A sus 25 años, Alexander Medina oriundo de Venezuela llega a Cúcuta, abriendo su camino en medio de la dificultad, superando cada obstáculo a costa de la precariedad y escasez.

“Durante un tiempo me tocó dormir en una sábana en el piso, pero siempre decía que en cualquier momento tenía que pasar por este proceso”.

Alexander Medina

A pesar de lo que estaba viviendo, sabía que esto era transitorio, pues durante un tiempo vendió pan por las calles en compañía de su hermana y su sobrino.

Esta difícil situación lo motiva a seguir superándose, buscando trabajo en una peluquería y es allí donde empieza a encontrar su camino.

En medio de su trabajo despierta una nueva necesidad, la de aprender y adquirir más conocimiento sobre el método y técnica de esta labor (estilista), pero el interés por educarse generó envidia en sus compañeros, algunos de estos siendo tropiezos para su vida laboral. Pero sin saberlo esto sería un impulso para surgir y despertar en él, el deseo de ser un gran profesional.

En medio de sus cambios de trabajo, Alexander se dio cuenta que lo que más le gustaba era cuidar la fibra capilar, pues desde ahí, la vida lo llevó a ciudades como Medellín y Bogotá donde recibió capacitaciones; sin embargo, no contando con los recursos necesarios para sus viáticos, él pasaba por encima de esto y su único interés era aprender.

“Durante las dos semanas de capacitación me alimenté con pan, no tenía suficiente dinero para comprar la comida, pero igual decía que no pasaba nada”.

Alexander Medina

Su inicio como educador

Cuando llegó la pandemia le atrasó su proceso como educador, pues ya no le era posible asistir a las capacitaciones, pero sin pensarlo esto le trajo un nuevo comienzo, el de iniciar las clases personalizadas.

Sus primeras clases fueron con dos personas; dándose a conocer por su trabajo fue creciendo su número de estudiantes, hasta que se le presenta la oportunidad de realizar un masterclass en Ocaña. Allí todo marchaba bien, el propósito de ese evento se había cumplido; sin embargo, las adversidades son parte del crecimiento y esta no fue la excepción, al salir del municipio recibió una llamada de extorsión, amenazándolo en que debía pagar cierta cantidad de dinero por su vida e integridad.

“Por el miedo a que me pasara algo negocié con esas personas y pagué lo que me pedían”.

Alexander Medina

A raíz de esto, Alexander no desistió de su objetivo; en las redes sociales ve una gran oportunidad para mostrar su talento creando así un nuevo contenido el cual hace que su propósito de educador tenga nuevas puertas abiertas llevándolo a realizar clases nacionales e internacionales. Con este avance pudo abrir su empresa “International Hair Platinum”, la cual es especializada en el cuidado y embellecimiento del cabello.

“Es bueno que en la vida a uno le pasen dificultades para poder surgir y crecer como persona”.

Alexander Medina

En muchos momentos la duda y la incertidumbre salían a la luz, pues él pensaba en lo que iba a suceder y si podría lograrlo, pero como su principal característica es buscar solución a los obstáculos que le lleguen, siempre encontraba como llevar a cabo dicho asunto.

Ahora Alexander Medina busca seguir creciendo y especializándose en su profesión, pues su mayor anhelo es tener su salón de belleza y una academia, con el propósito de brindar oportunidades laborales a sus estudiantes y seguir inculcando que la mejor forma de salir adelante es venciendo el miedo.

Redacción: Lili Erazo

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