Los mandatarios de Colombia y Venezuela, Gustavo Petro y Nicolás Maduro, se reunieron por primera vez en seis años, en Caracas. Luego de más de dos horas en el Palacio de Miraflores, los jefes de estado dieron una declaración conjunta sobre lo que fue su primer encuentro oficial.
Los temas abordados en la agenda bilateral fueron: el regreso de Venezuela al Sistema Interamericano de Derechos Humanos, la protección de la Amazonia, la cooperación entre las empresas Monómeros y Pequiven que son claves para el abastecimiento de fertilizantes en la región, el cambio climático y las relaciones bilaterales.
Petro en su determinación por reanudar las relaciones con la nación expresó junto a su homólogo, la necesidad de recuperar la seguridad en la zona limítrofe, añadiendo en primera instancia que fue “antinatural, en términos más humanos, diría, anti histórico, el que Colombia y Venezuela se separen”.
En su declaración a la prensa, Maduro mencionó, “hemos conversado ampliamente sobre las relaciones comerciales y económicas, sobre los nuevos pasos hacia una apertura total y asegurada de las fronteras”.
El presidente colombiano manifestó a su vez, que el camino para reconstruir la frontera comienza por golpear no tanto al obrero del narcotráfico, sino a los dueños del capital, ya que “La frontera quedó en manos de las mafias, de lo que llamamos las organizaciones multicrimen, organizaciones cuya cabeza, cuya jefatura, ya es multinacional”.
Dentro de los anuncios, Petro convocó un posible encuentro de empresarios binacionales en Cartagena, “Para que ellos mismos construyan los lazos de manera libre, que se fortalezcan las bases de un comercio, ojalá poderoso, ojalá plural, donde el pequeño campesino pueda llegar aquí, donde el pequeño campesino de aquí pueda llegar a allá”.
Acerca de la protección de la Amazonia se habló especialmente de la necesidad de tener una posición conjunta en defensa de la Amazonia ante la COP27, la Cumbre de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que se desarrollará la próxima semana en Egipto. Además, se invitó a que Brasil unifique esfuerzos en la revitalización y recuperación de la selva amazónica.
Otro punto clave fue la invitación del presidente Petro a Nicolás Maduro a reintegrarse al sistema interamericano de Derechos Humanos, una propuesta que Miraflores recibe de forma “receptiva”. Esto luego de la ruptura del Gobierno venezolano con los organismos internacionales, en medio de las acusaciones en su contra de presuntas violaciones a los Derechos Humanos y posibles crímenes de lesa humanidad que habrían ocurrido bajo la anuencia de la administración de Maduro.
Por su parte, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro calificó este primer encuentro como “fructífero” y anunció que «Venezuela regresará a la Comunidad Andina», a lo que Petro le solicitó a Chile, Ecuador, Bolivia y Perú que acepten el reintegro de Venezuela en la Comunidad Andina como miembro con todos los poderes, con todos sus derechos y deberes, a la que “algún día Venezuela fue parte fundadora, incluso, con Colombia”.
Maduro recibió a Petro en el Palacio de Miraflores, quien viajó acompañado de su jefa de Gabinete Laura Sarabia, el canciller Álvaro Leyva, el Embajador de Colombia en Venezuela, Armando Benedetti el Embajador de Venezuela en Colombia Félix Plasencia y el Embajador de Colombia ante la Organización de Estados Americanos (OEA) Luis Ernesto Vargas.
“Colombia y Venezuela, si algo tenemos, es un destino común y los gobiernos estamos obligados a trabajar siempre por el bien común”, agregó Maduro.
La cumbre a la que asistieron altos funcionarios se llevó a cabo después de un par de meses de coordinar esfuerzos para restablecer las relaciones bilaterales.