Vende, alegra y hace reír a sus clientes

Jesús María Ortega Albarracín, o mejor conocido como ‘la piroberta’ del barrio El Llano, se caracteriza por su gran labor como trabajador ambulante. Lleva más de 40 años de trayectoria en este mundo; Jesús exalta la entrega y el esfuerzo para salir adelante, demostrando que se puede vender y producir todo lo que se desee con enfoque y determinación.

«Por acá en el barrio El Llano todos me distinguen como ‘la piroberta’, me dicen, ahí viene ‘la piroberta’, el que vende jugos, el morcillero» Jesús María Ortega Albarracín

 

Debido a la situación de escasos recurso por la que su familia tuvo que atravesar, a la edad de 8 años, Jesús conoció el mundo de las ventas en las calles, viéndose en la necesidad de vender cigarrillos; tras un tiempo, comenzó a trabajar en el Anillo Vial, lugar donde el Ejército Nacional lo reclutó y se fue a prestar servicio.

«Estudié hasta tercero de primaria y luego estudié en la nocturna, pero como el trabajo mío era vender cigarrillos de noche, no pude seguir estudiando más»

Desde joven, el sueño de Jesús, también distinguido como ‘chucho’, era pertenecer al Ejército, pero al notar las situaciones de violencia a las que se había enfrentado debido a los fuertes combates, decidió retirarse, descubriendo que la violencia no era parte de su mundo.

«Yo de joven quería pertenecer al Ejército y pensionarme de ahí, pero para donde me mandaban no me gustó, era mucha violencia y combates»

Jesús Ortega: ejemplo de empuje

Jesús María, quien es muy conocido por sus morcillas, tiene más variedad de productos en su entorno de trabajo, vende jugos y salpicón, los viernes hace rifas, los días sábados vende cerveza y los domingos va al río, donde vende desde salchichón y génovas hasta mangos.

‘Chucho’ trabaja junto a su esposa y es reconocido por su carisma, alegría y ganas de hacer reír a las personas, debido a que no solo ofrece un producto, sino también, una experiencia de compra agradable y divertida, caracterizándose por su perseverancia y ganas de salir adelante, colocando siempre como base el amor por su trabajo para entregar a los clientes un servicio de calidad y variado para su degustación.

«No considero que haya un producto preferido por las personas, todo lo que saco les gusta, todo lo vendo, me dicen que todo muy rico»

Asimismo, Jesús María se destaca por preparar él mismo sus productos sin comprárselos a nadie, ya que para él es importante estar al tanto de la calidad y preparación de lo que ofrece al público; “yo mismo preparo las rellenas, no me gusta comprarle a nadie, sino hacerlas yo, aprendí de mi mamá porque ella era la que las hacía y yo le ayudaba, me untaba de tripa y demás por estar ahí pendiente”.

Aparte de la venta de comida, ‘chucho’ se disfraza los 31 de octubre, día de las brujitas y el 29 de diciembre, día de los locos, durante esas fechas, ‘chucho’ sale a las calles a recibir el apoyo de las personas mediante su creatividad, ya que no solo se disfraza, sino que también, imita a cada persona para alegrar a la comunidad.

 

Debido a la difícil situación económica por la que se está pasando, las ventas para Jesús no han sido muy buenas, actualmente ha notado como han disminuido, suceso que le preocupa y espera que mejore.

«Mi reto siempre es tener una buena producción de rellenas, pero ahorita se han bajado mucho las ventas, esto está muy pesado, yo estaba sacando 12 kilos de arroz y ahora solo 5, vamos de para bajo»

Una labor digna de admirar

Jesús María expresa que se siente orgulloso de todo lo que ha construido, destacando esto como un gran logro para él, dado que ha sacado adelante un negocio desde cero y sin rendirse, lo que lo ha llevado a ver los frutos hoy en día; “me siento muy agradecido con la vida por eso, trabajo con mi esposa, los dos juntos, unidos y tranquilos, para mí trabajar independiente es muy bueno”.

De esta manera, Jesús María les envía un mensaje a todos sus colegas, a quienes les recuerda la importancia de mantener su puesto de trabajo en buenas condiciones y atendiendo al cliente siempre con una excelente actitud.

«Yo le doy un consejo a todos los vendedores de la calle, que mantengan bien arregladito el puesto, bien barrido, bien presentado, porque vale la presentación, a uno le compran por la presentación y por como trate al cliente, si trata al cliente mal no vuelven»

‘Chucho’ invita a todas las personas que deseen degustar algo rico mientras hacen sus compras por el Centro de la ciudad, a que vayan a su negocio; cotidianamente se ubica sobre la Avenida 10 con Calle 9 y 8 del barrio El Llano, y en dadas ocasiones, lo pueden encontrar caminando por la misma zona del barrio.

 

 

 

Redacción: Camila González

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